21 de febrero de 2013

Que no te la den con “Coaching”



C
Con la crisis se abre la veda del desempleado, del desocupado, del desorientado, del desmotivado y, por qué no, del desgraciado. Psicólogos, psiquiatras, sociólogos, antropólogos y demás especialistas se ponen en marcha… Ojo, no busco enemistades entre el respetable del sector, sólo trasladar un sentir particular a través de estas líneas y, quién sabe, si hasta compartido o popular después de haberlas leído.

Fuente imagen: Roseta Forner


He calificado casi de “presa” y de “cazador” a otros y, puesto que no me gusta frivolizar, lo hago desde el mayor de los respetos a partir de estas premisas:


Siéntase presa aquél que, aún en desempleo, no hace nada por salir de su situación laboral; entiéndase por desocupado al ya empleado y que no cumple con las labores de su ocupación; desorientado es el que suele mirar a otro lado; y desmotivado… Desmotivados somos todos cuando vemos y sufrimos a los anteriores.


De los psicólogos y psiquiatras, aunque distintos por completo, facultativos en pro de solucionar problemas psíquicos o “seudo-psíquicos”; de los sociólogos y antropólogos, necesarios por norma para entender nuestros orígenes y el fundamento a nuestros comportamientos; y para los demás "especialistas", para ellos, los cazadores, va mi comentario y el peso de mi reflexión.


Aún a sabiendas de que existe un derecho constitucional al trabajo (para todos) he de entender que su ejercicio debiera hacerse siempre bajo las estrictas pautas de la ética profesional e incluso personal. En ese sentido, mi crítica va dirigida a todos aquellos que bajo el cobijo del magnetismo de la palabra “Coaching” se dedican a ofrecerse en calidad de “especialistas” que no son y, lo peor, a prometer cosas que no pueden cumplir. Ya sé… Pero centrémonos porque no lo decía por los políticos en general.


Existen muchos profesionales que bajo ésta u otras denominaciones, se preocupan de ejecutar las bases del Coaching, que no son otras que DIRIGIR, INSTRUIR y ENTRENAR a personas y, en ocasiones, a grupos de personas con un fin específico sobre sus metas o habilidades.


Pero, un momento: ¿acaso por asistir a varios talleres se erige alguien como profesional del Coaching?. ¿O por inventar una serie de palabras rocambolescas y fonéticamente atractivas se adquiere el nivel de excelencia necesario para transmitir esa profesionalidad con hechos?. 
Pues rotundamente no y ese es el intrusismo que arremete a los más débiles, perdón, los más vulnerables por su situación de indefensión laboral o profesional en la mayoría de los casos provocada por la denominada “La Cosa”, es decir, la crisis.


Haciendo uso de la “Biblioteca Libre” de internet recojo una serie de críticas populares que apuntan, fundamentalmente a que:


No utiliza una metodología claramente definida, haciendo que la oferta sea muy heterogénea y en ocasiones poco seria.


El enfoque en desarrollar la capacidad de obtener resultados y producir éxitos es otra gran crítica a la metodología.


La ética, responsabilidad y cuidado del entrenador, no siempre están salvaguardadas cuando no existen marcos regulatorios.


Posiblemente por una falta de regulación oficial, hay mucha gente que ofrece Coaching sin una formación específica.


Yo, personalmente, he asistido a varios cursos en esta materia y aplaudo la labor que realizan. Te diré algo: para el que precisa definir determinados aspectos de su vida, tengo la firme convicción de que son positivos, contribuyen en la búsqueda de su mejor yo, de su “Super Yo” si me apuras y, en consecuencia, para la búsqueda de nuevos proyectos de futuro. Por eso, del mismo modo que se hacen cribas por parte de los headhunters, ¿no crees que antes de convertirte en un coachee deberías realizar tu criba particular entre varios para definir su valía y profesionalidad y seleccionar al mejor coach?


En referencia al concepto en sí, lejos de remitir a Wikipedia, al manual de turno o a los eruditos, he preferido compartir contigo este video que en muy pocos minutos deja, en gran medida, definido esta percepción de la realidad sobre el intrusismo al que me refiero.



Por mi parte, seguiré diciendo que el mejor aporte a cualquier expectativa presente o futura es, sin duda, la mejor de las actitudes y, sobre ese paradigma debería marcarse una particular visión, la de comenzar siendo tu propio Coach personal, iniciando tu propia REVOLUCIÓN en la que la parte emocional no abandone al torbellino de conocimientos y aptitudes que puedas asimilar, en la que seas tú tu principal aliado y, sin duda, tu mayor admirador. Esa es:




¿Estás dispuesto?

12 comentarios:

EMILIO dijo...

Estimado David:

Bien tirada.

Un abrazo.

Gemma Martín Naranjo dijo...

Gracias David.

No puedo estar más de acuerdo contigo. Tengo bastantes ejemplos que apoyan lo que comentas en tu post. Lo que sucede es que se juegan con los anhelos de las personas y "nos venden" cosas que queremos escuchar.

En mi caso, valoro a un profesional por el trabajo que haya hecho consigo mismo/a. Por la congruencia que muestre.

Evidentemente el asistir a seminarios o cursos no te da las habilidades necesarias para trabajar con personas. Es la experiencia vital junto con esos conocimientos los que te pueden llevar a poder ser un buen acompañante.

Saludos,

Gemma Martín Naranjo

Unknown dijo...

Un post muy interesante, me sorprende que escribas sobre un tema que puede crear controversia, me gusta por que eres de los que arriesgan al decir realmente lo que piensan, en un mundo tan superficial, decimos lo que quieren escuchar.
Refiriendo al tema, siempre hay "quienes" aprovechan, oportunidades de hacer caja, sin importar el daño que se puede llegar a hacer a personas ingenuas, que quizás estan pasado por momentoS muy difíciles.

Exmeli Mendez


Davd Fernández Ojeda dijo...

Gracias, muchas gracias. Como bien apuntáis es un tema que no suele tratarse "en público" pero, desde mi punto de vista, se puede hablar de todo desde el respeto a los demás. He de decir que no todos tienen esta forma de pensar y, de hecho, algunos grupos de ciertas redes sociales profesionales han censurado el post negando su publicación porque -y cito textualmente- "podría molestar a algunos miembros".
No me preocupo por mí o por mi post, sino por ellos... En cualquier caso, actitudes aparte, seguiré escribiendo desde el respeto y consideración a los demás, con criterio propio, porque, no sólo me lo debo a mí mismo, sino a todos vosotros que me premiáis con vuestra lectura.
Por tanto...
GRACIAS, Exmeli.
GRACIAS, Gemma.
GRACIAS, Antonio.

Marina dijo...

David, muchas gracias por tu aportación que es muy enriquecedora. También me ha gustado mucho el video en el que queda todo muy claro.
Un saludo

Anónimo dijo...

Hola David, supongo que de igual manera que se le exige profesionalidad y conocimientos a un fontanero o a un cocinero, debería hacerse extensible a todas las profesiones, en este caso un Coach.
A los "no profesionales" a los que te refieres en tu post, yo les llamo Caballos de Atila porque por donde pasan no vuelve a crecer la hierba o por lo menos crean una mala fama sobre una actividad como el Coaching.
Yo defiendo las certificaciones de las asociaciones nacionales e internacionales que mediante exámenes y pruebas aseguran un nivel profesional.
Un saludo.

Davd Fernández Ojeda dijo...

En primer lugar, muchas gracias, Marina y, por supuesto, "avanzalaboral".
Qué duda cabe que intento invertir las mayores cuotas de sentido común en mis posts para combatir lo que me de una u otra forma me inquieta. Y par ello, me gusta elegir imágenes sugerentes o videos clarificadores y motivadores.
Este tema, me inquieta, como tantos otros... Y, como decía un antiguo profesor (don Estéban, hace ya más de 30 años): "El sentido común es el menos común de los sentidos"

Anónimo dijo...

Hola David, me quedo con tu último comentario "iniciando tu propia REVOLUCIÓN en la que la parte emocional no abandone al torbellino de conocimientos y aptitudes que puedas asimilar, en la que seas tú tu principal aliado y, sin duda, tu mayor admirador" porque precisamente me siento identificada con algunos, a la larga te das cuenta sólo te crean estados emotivos o eufóricos por contraste con tu situación, si alguien se muestra amable cuando lo estás pasando mal, y se presentan como profesionales, esperas que tengas recursos, ideas y capacidad de análisis de una situación para poder crear soluciones, pero en realidad sólo tienen un discurso que suena bien pero muy poco por debajo. A la larga me di cuenta de que yo había tenido bastante mejor sentido común que ellos, pero que su parafernalia emotiva me había desviado de mis intereses. Sólo decirte que me ha gustado mucho tu artículo porque ese mundillo no acepta las críticas como el resto de profesiones, no se someten a esquemas que puedan mostrarte y demostrarte que saben lo que hacen, no se comprometen a resultados, porque éstos son subjetivos y si te dan plazos es a larguísimos plazos y ni siquiera son capaces de reconocer que no te están ayudando con lo que ya por lo menos ya podrían decirse que son algo profesionales. Nada, tomo tus palabras y haré más uso de mi sentido común.
Un saludo.

Davd Fernández Ojeda dijo...

Muchas gracias, "Anónimo".
No sólo me alegra que te guste sino que, además, comentarios como el tuyo siempre reconfortan y animan a seguir escribiendo con afán de compartir.
Hasta pronto!
(David F.)

Fernando Castilla dijo...

Hola David, estoy muy de acuerdo con la oleada de gente que se ha subido al carro de "charlar" y pensar en crear "magia". En lo que difiero es en la posibilidad de utilizar el Coaching profesionalmente en empresas, para temas como ventas, liderazgo, comunicación. Y susn resultados son fácilmente constatables, traducidos a números, no haciendo un taller ni un curso, sino un acompañamiento personalizado de ese equipo. Independientemente de que sea realicen sesiones individuales con determinados miembros del equipo.

Creo en el Coaching grupal, y lo vivo cada día con grandes Coach. Que no excluye la sesión personalizada.

No creo que ningún Coach aprendiese sólo, en sesiones individuales, todos crecieron en un grupo, recibieron clases y Coaching grupal y ahora no puede ser que para otros no sirva.

Muy interesante tu punto de vista. Gracias.

Davd Fernández Ojeda dijo...

Gracias, Fernando, eres muy amable.

Que duda cabe que ningún profesional llega a realizarse sin haber experimentado el trabajo en grupo, en equipo y, como no podía ser de otra manera, el trabajo del coach también se hace notar de manera más notable si cabe en las sesiones grupales.

Sin embargo, no está de más, sacar a nivel individual conocer y sacar lo mejor de uno mismo. En eso, también, un coach puede ayudar aunque ni él ni nadie tiene la fórmula del éxito.

¡Hasta pronto!
(David F.)

Unknown dijo...

Estimado David, buenas tardes.

Te pongo aquí el enlace que te llevará a lo que pienso sobre el post que has escrito. Por tema de espacio he tenido que poner el enlace, ya que entero no me dejaba.
https://plus.google.com/+AntonioRodríguezLepe/posts/Trd5ydt6zcr

Gracias.